Son la sensibilidad y la armonía cualidades inherentes al ser humano, que sería de nosotros sin ellas, que sería de nosotros si únicamente nos dedicáramos a ver sin observar, a existir sin sentir, a comer sin degustar, a hablar sin comunicar, que sería de nosotros sin esa poesía que nos hacen superar la rutina diaria…

Así lo siente Sonia ¿Qué sería de ella sin rodearse de aquellas cosas que la hacen feliz? Lejos de acumular objetos sin sentido, ella sabe apreciar el valor de las cosas bien hechas (que no por ello caras, pero sí con un precio justo), arte y antigüedades (del siglo XX en su gran mayoría), objetos nuevos, regalados…logrando con todo ello un conjunto equilibrado, ecléctico y muy personal.

Hola Sonia, gracias por enseñarnos tu casa. Cuéntanos de donde te viene esa afición por las antigüedades

Hola, encantada de estar con vosotros veo que compartimos la pasión por la decoración..…Sin duda se lo debo a mi madre, ella me transmitió su amor por las antigüedades….le encantaban, nunca se dedicó a ello profesionalmente, aunque podría haberlo hecho… me llevaba con ella a ver las ferias en Madrid, como la de Almoneda. Esto, unido al hecho de que a la familia de mi marido también le gustan me ha permitido poder disfrutarlo siempre y sentirme apoyada en este aspecto.

Aunque tu marido es francés y habéis vivido mucho tiempo en Francia, tú le conociste aquí en Madrid…

Sí, primero vivimos aquí en Madrid, de esa primera época tengo el sofá azul tapizado con tela de “El lienzo de los Gazules” del salón y la pintura japonesa del dormitorio principal, que compré en un mercadillo de Becara. (Me hace gracia como utiliza los elementos decorativos y antigüedades como referencia de episodios de su vida, como quien lo hace con su primer viaje a Benidorm…)

Después en París, ya criando a tus hijas te adentraste en el mundo de los mercadillos…

Sí, allí  hace unos ocho años, me adentre en el mundo de mercadillos de almonedistas y antigüedades de París, estaban de moda los muebles de los año 40 y 50. Allí se reúnen las casas de subastas en un solo edificio, es como un sueño ¡¡¡¡las tienes todas juntas¡¡¡¡

Allí compre, por ejemplo la lámpara Panton y el mueble buffet del comedor

Dime, ¿A qué mueble u objeto le tienes más cariño?

Les tengo cariño a todos por igual, todos me recuerdan algo de mi vida. Disfruto persiguiendo una pieza que me gusta el tiempo que haga falta hasta que la consigo al precio que quiero, para mí es un reto y un placer. Soy coleccionista, me encanta, me lo quito de otras cosas porque entiendo que es una inversión de por vida, y además me hace feliz.

No entiendo la compra compulsiva, el usar y tirar,  pienso mucho antes de comprar algo, y no me decido hasta que estoy muy segura, ya que probablemente pase conmigo el resto de mi vida y después pase a mis hijas.

Pero habrá algo que te guste especialmente..

Bueno, debo confesar que los cuadros son una de mis debilidades. Me gusta mezclar estilos muy diferentes, sobre todo pintura contemporánea.

La otra son las lámparas, especialmente los apliques, sobre todo franceses e italianos. Seguro que sabéis que existe un mando a distancia (de venta en Leroy Merlin) que centraliza todos los apliques de la casa, si no me tiraría una hora encendiendo y apagando luces jajajaj

Seguro que tienes miles de anécdotas

Sin duda, de aviones me vienen varias a la cabeza…como la lámpara de Maison Jansen que compré en París y que me traje en la cabina del avión como equipaje de mano.

O el cofre comprado en Birmania, donde los monjes guardan el arroz, que también me traje en el avión debajo del brazo como quien dice…

El despacho ha viajado bastante, lo compré en Madrid, y me lo llevé a París, el transportista fue el mismo que luego me hizo la mudanza cuando nos volvimos de París, y se acordaba de los muebles, me pareció sorprendente.

¿Cuál sería el estilo decorativo que te definiría?

No tengo un estilo particular, he ido evolucionando a  lo largo de los años, aprendiendo, probando, hasta dar con mi estilo personal, el que me caracteriza, el que define mejor mi personalidad y me hace sentirme bien. …

Simplemente no podría vivir en una casa que no tuviera una razón de ser más allá de la funcionalidad de un sofá para sentarse, una mesa para comer… Pienso que es importante rodearnos de referencias visuales, cultivan el espíritu, son parte de la educación como personas, también de lo que le transmitimos a nuestros hijos. Es importante que crezcan apreciando las cosas hechas con cariño y dedicación.

Todos tus muebles son de anticuario

No, también tengo bastantes muebles de Ikea, sobre todo en las habitaciones infantiles, la estantería del salón…., muebles de lista de boda….

Nos encanta la lámpara de pájaros….

La compramos para mi hija mayor cuando nos vinimos a Madrid, ella estaba un poco triste y sabíamos que le gustaba mucho, así que pensamos que sería un buen regalo de despedida de París. La compramos en la tienda de regalos del Museo Louvre

Háblanos del comedor, además del maravilloso buffet que nos has comentado..

La mesa de comedor es una edición de 1970 de Roche Bobois, las sillas son una mezcla, unas son italianas que compré en la feria de la Almoneda y dos son francesas de los años 40.  La escultura de alabastro en el centro del buffet es estilo Art Decó, era de la familia de mi marido.

El espejo es francés del XIX, cuando llegamos a esta casa los operarios de la mudanza me lo colocaron al revés, y bueno, no es muy ortodoxo, pero me hizo gracia y así se quedó jajaja

Mientras subimos al piso superior, le preguntamos por qué piensa que los franceses son tan aficionados a la decoración, pero sobre todo a las antigüedades y sus mercadillos

Bueno, supongo que hay muchas razones, el clima, por supuesto, en Inglaterra y Francia el tiempo no acompaña, se sale menos y se cuida más las casas, es donde se recibe a los amigos, se celebran cenas….aquí la vida se hace más en la calle.

Además en España no hay mucha cultura de la decoración, quizás ahora está cambiando, tiene que existir una apertura al exterior, a que entren nuevas ideas, que haya un intercambio cultural…pero por regla general siempre ha sido la última de la lista de prioridades. En Francia en cambio está muy arraigada la cultura del mercadillo de muebles, en cada pueblo hay uno, los estudiantes amueblan sus pisos con ellos, van adquiriendo esta afición desde muy jóvenes. Estos mercadillos son realmente maravillosos, puedes encontrar cosas curiosas, baratas y divertidas.

Estamos en el dormitorio principal…..nos llaman una vez más la atención los cuadros y las lámparas….y las mesillas

Las mesillas de noche son del mercado de las pulgas de París, son francesas, años 40-50

La lámpara de la derecha me la dio mi suegro, de su época de estudiante, la de la izquierda es danesa, la compré a un anticuario alemán

Como podéis ver esta casa está llena de pequeñas historias, todas ellas maravillosas y muy personales……con un toque francés.

Autor: Carmen Pérez Díaz

Fotos: Claudia Tur Bungard

Estilismo: Julia García-Fraile